miércoles, 3 de marzo de 2010

Dios es justo

Nuestra salvación está fundada no sólo en el amor y en la gracia de Dios, si no también y con mayor solidez en su justicia. Nuestro Dios es justo; la justicia y la rectitud son el cimiento de su trono (Salmos 89:14). Si el fuera injusto su trono carecería de fundamento. Por lo tanto si nuestra salvación se basa en la justicia de Dios, ciertamente es sólida y estable.
Del mismo modo, nuestro problema con Dios antes de ser salvos era un problema legal, habíamos quebrantado su ley por nuestro pecado, y por ello habíamos quedado sujetos al justo juicio de la ley. Conforme a la ley, todo trasgresor debe morir( Romanos 6:23, Ezequiel 18:4). No depende de que Dios, por amor pase por alto todos nuestros pecados olvidandose del juicio de la ley; si El hiciera esto, Su trono se derrumbaría. El está obligado por su propia ley a juzgar el pecado.
Ya que el deseo de Dios era salvarnos y nosotros no eramos capaces de pagar la deuda de nuestro pecado, El en su misericordia decidió pagarla por nosotros. Hace 2000 años, Jesucristo, vino a morir en la Cruz para saldar la deuda de nuestro pecado. Unicamente el era apto para morir en nuestro lugar, ya que en El no existía pecado. Por esta razón, su muerte fue aceptable ante Dios y El lo levanto de entre los muertos.De esta manera nuestra deuda por el pecado está justamente pagada , y por consiguiente, somos salvos.
Sobre la base de todo lo anterior, ¿ podría Dios quitarnos la salvación que Cristo compró? ¡No, ya que la deuda fue saldada!.

Fragmento extraido del libro "Elementos Básicos de la Vida Cristiana" por Witness Lee y Watchaman Nee.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Me encantó esta entrada.
¡Aleluya! Dios es justo. Este es el cimiento de Su trono. Él está obligado a juzgar el pecado pero Él pagó nuestra deuda. Pudo hacer esto pues en Él no existía pecado. Qué excelente noticia, nuestra salvación es firme y segura. Cuidémosla entonces.